Vicentin: los acreedores piden no pesificar las deudas de la cerealera
Un grupo de acreedores de Vicentin protestó en el centro de la ciudad de Rosario, frente a las oficinas del estudio de la sindicatura del concurso de acreedores, con el objetivo de sumar presión en una futura negociación para evitar que se pesifiquen las deudas que tiene con ellos la agroexportadora, que entró en default el 4 de diciembre pasado, con un pasivo superior a los 99.000 millones de pesos.
Hay dos puntos críticos que empiezan a despuntar en un futuro desenlace del concurso de Vincentín: en diciembre pasado, cuando la empresa entró en cesación de pagos, el dólar oficial cotizaba a 63 pesos y el precio de la soja era de entre 50 y 80 dólares menos que la cotización actual. La pelea que emerge públicamente es en su mayoría de los acreedores que entregaron soja a Vincetín con precio a fijar y en el medio de la operación la firma cayó en default. La deuda de Vicentin con la mayoría de los productores y acopiadores es por granos que recibió y no pagó. Sólo un puñado de esos granos no pagados fue facturado, ya que la gran mayoría se había enviado a depósito sin precio fijado. La disputa es a qué valor se cobrará la soja vendida.
Desde la empresa ratificaron que la agroexportadora buscará hacer una propuesta a su debido tiempo en el marco del concurso de acreedores -será el año próximo-, donde tiene que lograr el aval de más del 50 por ciento de las capitas de acreencias. Y recordaron que en febrero pasado en la propuesta de Acuerdo Preventivo Extrajudicial, que no prosperó y la firma se presentó luego en convocatoria, nunca se propuso una pesificaron de las deudas.
«Queremos que no se pesifiquen nuestras acreencias, ya que es un mercado que se mueve en dólares. El grueso de la deuda comercial de Vicentín era mercadería entregada a fijar con contratos que son en dólares y que se pesifican en el momento en el que uno le pone precio y lo factura», afirmó Florencia Trucco, integrante de empresa La Clementina, acreedora de la agroexportadora originaria de Avellaneda.
«El temor que tenemos es que si no hay una negociación Vicentin licuará una deuda gigantesca con los sectores productivos», dijo en diálogo con LA NACION un corredor y acopiador que está entre los diez acreedores más importantes del concurso.
A la par de las protestas, el nuevo directorio de Vicentin comenzó a realizar rondas de reuniones con acreedores, como la Asociación de Cooperativas Argentinas (ACA), la Bolsa de Comercio de Santa Fe, la Sociedad Gremial de Acopiadores de Granos y el Centro de Corredores de Rosario, entre otros. En estas reuniones virtuales participó el nuevo asesor externo de la agroexportadora Diego Guelar, ex embajador de Argentina ante China entre 2015 y 2019.
El 15 de octubre pasado los accionistas de Vicentin designaron en la sede de la empresa en el norte de Santa Fe a tres directivos que conducirán la agroexportadora en el medio de una compleja convocatoria de acreedores, que tiene un pasivo de más de 99.000 millones de pesos. El directorio está encabezado por Omar Adolfo Scarel, Daniel Orestes Foschiati y el abogado Fernando Bougain.
En un comunicado que enviaron a sus asociados los corredores de granos señalaron que desde la empresa dijeron que están «dispuestos a aceptar propuestas» y que están «abocados a recuperar la confianza y el diálogo con los clientes».
Desde el Centro de Corredores de Rosario le plantearon a los nuevos directivos de Vicentin que «sin propuestas va a ser difícil recuperar la confianza». «Se solicitó al directorio transparencia para dar certezas a nuestros asociados y diálogo. Hasta aquí la transparencia estuvo ausente y el diálogo fue inconducente», señalaron. En el caso de la Bolsa santafecina, las autoridades de agroexportadora y de la entidad reconocieron -según un comunicado de la empresa-«la importancia de que Vicentín pueda mantener su actividad productiva mientras las distintas partes involucradas buscan una salida ordenada del proceso concursal».
Fuente: La Nacion