Medidas extremas en Portugal para frenar la expansión del coronavirus
La nueva variante supera ya el 50% de todos los contagios en el país luso y acelera su tercera ola.
Portugal ha decidido imponer medidas y restricciones duras para evitar el sinfín de contagios y fallecidos por coronavirus que están asolando el país. Una de las últimas medidas que ha establecido el país luso ha sido cerrar sus fronteras ante la alta transmisión del virus y sus variantes.
A mediados del mes de diciembre, alrededor del día 17, un pasajero de las decenas de vuelos que unen Londres con Lisboa viajó con un equipaje que no esperaba. En su sistema respiratorio ya se multiplicaba, a toda velocidad, la variante SARS-CoV-2 B1.1.7 para saltar a otros huéspedes gracias a los aerosoles respiratorios. No sabemos su nombre, ni si es hombre o mujer.
La mala situación en Portugal también está afectando a España, y el Ministerio de Sanidad ha contabilizado 1.218 casos importados desde que se activaron las alertas por la cepa británica, en diciembre pasado. También se han establecido en los pasos hacia Portugal, el país europeo con mayor incidencia, cerca de los 1.600 casos por cada 100.000 habitantes.