La Mesa de Enlace decidió continuar con el paro en medio de la reapertura parcial de las exportaciones de maíz

«No queremos volver a recetas que fracasaron. Al productor le compran barato y terminan exportando caro», habían anticipado desde las gremiales del campo.

«Estamos haciendo análisis internos, la medida es lo que pedíamos pero no con una limitante de 30.000 toneladas por día», comentó hoy temprano Carlos Achetoni, de Federación Agraria Argentina (FAA), sobre la reapertura parcial de las exportaciones para el maíz.

Entre otras cosas, desde las gremiales de productores buscaban conocer mayores detalles de la medida que anunció anoche el Gobierno, a través del Ministerio de Agricultura. A la medianoche, se conoció una comunicación en donde se dejaba sin efecto provisoriamente la medida de suspensión de registros de DJVE de maíz. En este sentido, mantendrán un encuentro con el ministro de Agricultura, Luis Basterra.

No obstante, durante el período de análisis de las alternativas para el logro de estos objetivos, mientras se alcanzan los consensos, el MAGyP, a través de la Subsecretaría de Mercados realizará un monitoreo a fin de garantizar la disponibilidad para la demanda interna de maíz de la campaña 19/20. A tal efecto, las DJVE Maíz 19/20 no podrán superar las 30.000 toneladas diarias.

En este sentido, la Mesa de Enlace decidió continuar con la medida de fuerza, que incluye un cese de comercialización de granos. “De momento el paro sigue en pie y sigue funcionando”, expresó Jorge Chemes, presidente de CRA a Radio Mitre.

Además, agregó: “Lo que necesitamos es la eliminación total”. En este sentido, sostuvo que no ven como favorable la medida porque consideran que está dentro de una intervención.

“Vamos a vender lo que el gobierno autorice, el problema acá no es solamente el tema del tonelaje, sino la idiosincrasia intervencionista en el mercado que no hace al desarrollo del mercado de maíz o de cualquier mercado de granos”, argumentó Chemes antes de la reunión con la Mesa de Enlace.

A modo de ejemplo, desde FAA estiman que, si todos los días se pudieran exportar 30.000 toneladas, se podrían vender al exterior 1,5 millón de toneladas hasta fines de febrero: «Con la provisión local, estarían sobrando 7 millones de toneladas».

«La limitante tendería a que caiga el precio del maíz y se complicaría al sector productivo, dejaría el cereal a merced del sector exportador y el sector concentrado», comentó Achetoni en diálogo con El Destape y agregó: «Se desalienta la producción y se genera incertidumbre a nivel internacional». «Estamos analizando entre las entidades. Tenemos que consultar con el Gobierno qué es lo que se pretende, no queremos volver a recetas que fracasaron. Al productor le compran barato y terminan exportando caro».