Gobierno anuncia hoy nuevas medidas: obligación de ir a clase quedaría en suspenso
El GACH planteó adelantar el asueto de Semana Santa para liceos o UTU, aunque mantuvo su postura de que los jardines, escuelas y el primer año de educación media deber continuar la presencialidad.
En 15 días Uruguay sumó tantos infectados por el nuevo coronavirus que, si se los reúne en una tribuna, completarían la Ámsterdam o la Colombes del Estadio Centenario. En 15 días la ocupación de CTI por enfermos del COVID-19 aumentó 72%. Y en 15 días la movilidad -medida a través de Google- llegó a los niveles de comienzos de diciembre. Por eso científicos y autoridades coinciden: algo hay que hacer, ese algo debe reducir la circulación del virus y el momento es ahora.
El gobierno tomará definiciones hoy a la tarde luego de la reunión del presidente Luis Lacalle Pou con su gabinete. Habiendo transcurrido más de un año desde el comienzo de la pandemia, en Torre Ejecutiva entienden que “no hay nada para inventar”, por tanto sobre la mesa estará la “marcha atrás” en algunas actividades.
Ayer mismo se anunció la suspensión de torneos deportivos amateurs (como la Liga Universitaria) y el pedido de extensión, por treinta días más, del límite de derecho a reunión (la Policía podrá seguir dispersando aglomeraciones).
Los científicos que asesoran al gobierno le insistieron a Lacalle Pou con la necesidad de reducir la movilidad y evitar que se llegue al escenario de mayor riesgo según la clasificación de la Organización Mundial de la Salud (de hecho, algunos indicadores ya están en ese nivel). Por eso se aferraron al documento que habían elaborado a comienzos de febrero en el que se enumera una serie de recomendaciones: desde el cierre de teatros, cines y bares, hasta la suspensión de clases presenciales en la educación media y universitaria.
Tras un encuentro con el mandatario, los coordinadores y subcoordinadores del GACH intercambiaron ayer sus visiones sobre la marcha epidemiológica. Esas visiones serán comunicadas hoy. Según supo El País, los científicos dejaron en claro que los jardines, las escuelas y primer año de liceos y UTU deberían seguir con presencialidad. Eso sí: el Ministerio de Educación no descarta dejar en suspenso la obligatoriedad de la asistencia a efectos de quitarles a los padres la presión de enviar a sus hijos sí o sí.
En el resto de la educación se abre una serie de posibilidades. Una de ellas, entre las que los científicos manifestaron su acuerdo, es adelantar las vacaciones de semana de Turismo para liceales y UTU (siempre desde segundo año en adelante). Ciudadanos, del Partido Colorado, también planteó una medida en este sentido. La otra opción es hacer un corte por regiones, en ese caso priorizando el freno a la presencialidad en los departamentos fronterizos que están en la zona roja según la clasificación de Harvard (Artigas, Rivera y Cerro Largo). Una tercera variante sería tender a un modelo mixto: ya sea unos días de clase en el aula y otros virtuales, o bien la partición de grupos entre virtuales y presenciales.
Pero las opciones, al mismo tiempo, chocan con la realidad: este marzo están fijadas mesas de exámenes en educación media (incluso algunos estudiantes dependen de estas pruebas para acreditar el pase definitivo a la universidad). El miércoles comienza una nueva ronda de asignación de horas docente en Secundaria (restan por entregarse unas 14.000 horas). Y este mes, a la vez, se prevé que los liceos públicos reciban hasta 3.000 alumnos nuevos que provienen de privados o de UTU. A estos estudiantes se requiere asignarles un instituto y un grupo, que a su vez tenga todos los profesores designados, si es que las clases pasaran a la virtualidad.
El panorama es más complejo aún si se tiene en cuenta que hay miles de escolares y liceales que comen en sus centros educativos.
En ese sentido, el ministro de Educación, Pablo Da Silveira, será quien lleve la voz cantante a la reunión de gabinete. El presidente del Codicen, Robert Silva, está de baja por COVID-19 y su lugar es ocupado desde ayer por Dora Graziano (quien es consejera política propuesta por Cabildo Abierto).
Dos de cada tres contagios se están dando dentro de las propias familias. Entre los matemáticos e ingenieros que analizan la movilidad en Uruguay no hay consenso de que el cierre de centros educativos haga la diferencia en la reducción de la movilidad.
La revista científica Nature publicó el pasado 7 de enero un artículo en el que siete académicos estadounidenses realizan simulaciones de cómo afectaría la movilidad cerrando o abriendo determinadas actividades en Nueva York, San Francisco y Chicago. En el estudio comprueban que, para cualquiera de estas ciudades, el funcionamiento de bares, pubs y restaurantes es de lo que más movimiento genera.
Hay otras actividades, que están a estudio de los ministros uruguayos, que generan menos impacto. Es el ejemplo de los espectáculos (son pocos, requieren de protocolo estricto y aforo). Pero una fuente que participará del consejo dijo: “El cierre de espectáculos es también una señal para que la ciudadanía reaccione y se evita así que quienes concurrieron al espectáculo luego se vayan a cenar al bar o tomarse una cerveza con los acompañantes”.