Lo Último

El transporte, atrapado entre el boleto y los subsidios

Desde Nación se modificó el esquema que permitía costear combustible y sostener congeladas las tarifas. En nuestra ciudad, el pasaje debería rondar los 36 pesos, pero el Municipio no dispone de capital para enfrentar un panorama preocupante. Aquí, la voz de los empresarios.

El servicio de transporte público en nuestra ciudad es tema de agenda, tanto para la Intendencia como para los empresarios habida cuenta de los subsidios previstos desde Nación y, fundamentalmente, el costo que podrá tener el boleto.

Lucas Fernández, gerente de Autobuses Santa Fe, brindó detalles del encuentro que tuvo lugar ayer en la sede del Palacio Municipal, con Emilio Jatón a la cabeza. En su paso por ATP, sostuvo que “sin recursos” no es posible congelar la tarifa del boleto. “Ya pasamos por eso. Se acumuló sin recursos y lo que provocó fue menguar la calidad del sistema. Veníamos con un plan de renovación de unidades y ese proceso se interrumpió el año pasado” por el mentado congelamiento del valor del boleto, dispuesto en la gestión pasada.

En ese orden, Fernández apuntó a lo central del problema: “El transporte es un hecho de la economía como cualquiera. Más allá de cualquier voluntarismo, es un hecho económico. Somos empresas y no tenemos manera de financiarnos sin la tarifa o subsidios que, en realidad, reemplazan parte del ingreso que debería ser por tarifas”, explicó.

Consultado sobre la proyección del déficit de continuar la actual situación, el empresario aludió a la preocupación que se le manifestó al intendente a instancias al esquema de subsidios planteado desde Nación “para los próximos cuatro meses”. “El Estado plantea un cambio de normas del año pasado con un esquema de distribución de subsidios para las jurisdicciones que no tenían Sube y (otro) para las que tienen Sube”, ilustró. Y consignó: “De las dos resoluciones, el Estado (nacional) plantea sostener una y derogar la otra. La que se deroga no se reemplaza”. En cambio, sobre la que se sostiene se busca agregar un monto adicional para dar lugar al congelamiento de tarifas que se traduce en 20 pesos por cada litro de combustible consumido. En cuanto al precio mayorista del combustible, Fernández precisó que, con respecto al surtidor, hay una diferencia de dos pesos.

Además, de oneroso que resulta el cambio de los vehículos, las tarifas y el combustible, se debe contemplar la masa de trabajadores. En ese contexto, la conclusión de la conversación que ayer los empresarios sostuvieron con el jefe del Municipio versó en “llevar adelante todas las gestiones que se puedan llevar”. Pero “la Municipalidad no tiene capital para poder enfrentar ninguna cuestión económica. El planteo también se lo hicimos a la provincia. Y, además, la Cámara de Transporte lo planteó a nivel nacional”.

En términos prácticos, la tarifa en nuestra ciudad es de 28,90 pesos; mientras que el estudio del órgano de control de agosto de 2019 arrojaba una cifra cercana a los 32 pesos. Dicho de otra forma, el déficit –desde septiembre hasta hoy– es de unos cuatro pesos por boleto. Aunque, el estudio hecho por los propios empresarios arroja un valor de 36,90. En ambos casos, “está contemplado el esquema de subsidio del año pasado”. Para nuestra, el subsidio que se enviaba era de unos 24 millones de pesos mensuales que al presente, con las nuevas disposiciones, “no existen más”. De hecho, este mes ya no se recibió.

El esquema de beneficio con respecto al combustible bajaría a 12 millones de pesos, a lo que se sumarían otros 10 millones “que deberían estar afectados a la paritaria que cierra 2019”, aclaró Fernández. Y definió: “La salida es repensar la resolución porque la discrecionalidad, que se quiere quitar, benefició a la ciudad. Y lo que pedimos es que se repiense –insistió– porque no hay posibilidad de trasladarlo a tarifa”.

Etiquetas