Ese el objetivo de los programas que impulsa el Movimiento Popular La Dignidad para paliar los efectos de la crisis en los sectores más vulnerables.
Si algún efecto directo tiene la crisis económica es la profundización de los problemas en los sectores más vulnerables. Al respecto, Carlos Abad, del Movimiento Popular La Dignidad, comentó en diálogo con ATP la tarea que llevan adelante en los barrios y villas de la ciudad.
“Las líneas van desde la alimentación en una red de 25 comederos y merenderos. Diariamente se alimenta entre 2500 y tres mil niños y niñas. En materia de trabajo, tenemos cooperativas. También tenemos la línea de educación que tiene que ver con salud, dispositivos con centros de día, abordajes comunitarios por consumos problemáticos, parador nocturno para gente en situación de calle, un jardín comunitario para los hijos e hijas de las barriadas”, detalló entre otras tantas acciones.
Abad también apuntó a la importancia de “disputar el sentido” y “demostrar que hay otra manera de hacer las cosas en la vida cotidiana, con un diálogo permanente con distintos sectores de la sociedad y los tres estamentos del Estado”.
En ese contexto y en consonancia con la angustiante situación que viven los sectores más pobres, se impulsaron los programas Buen Vivir, Almacenes Populares y Club de la Leche. Las iniciativas apuntan a “hacer llegar alimentos de buena calidad y bajo costo a los barrios; en su mayoría son productos cooperativos”, subrayó el militante.
Asimismo, y como respuesta a las consecuencias de la política económica que fomentó el gobierno de Cambiemos, Abad expresó que “en Argentina cayó un 18% el consumo de leche, es la tasa de consumo de leche más baja de los últimos 29 años”. A ello se añade el 40% de la población que vive en la pobreza. “Esto hace que los movimientos populares tomemos ese diagnóstico para impulsar propuestas. El objetivo es que se pueden integrar un plano de política pública”, definió.
Fuente: Rueda de Prensa